Septiembre siempre llega con un aire de nuevos comienzos: se acaban las vacaciones y toca retomar la rutina escolar. Aunque este momento puede generar ilusión, también es habitual que provoque cierto estrés, tanto en los niños como en los padres. La organización, los preparativos y la adaptación a nuevos horarios pueden convertirse en un desafío. Por eso, desde Farmacia Lilium queremos darte algunas pautas sencillas para que el regreso a clase sea más llevadero y positivo para toda la familia.

Anticípate y reduce el estrés

Los días previos al inicio del curso suelen estar cargados de nervios. Para gestionarlos mejor:

  • Reserva pequeños momentos solo para ti: leer, pasear o cualquier actividad que te relaje.
  • Comparte responsabilidades con tu pareja, familiares o incluso con los propios niños, para no llevar todo el peso encima.
  • Técnicas como el yoga, la meditación o la respiración consciente son grandes aliadas para mantener la calma.
  • Prepara con tiempo mochilas, ropa y material escolar la noche anterior. Así, la primera mañana será más tranquila.
  • Y no olvides salir de casa con tiempo: evitar las prisas marca la diferencia en el inicio del día.

Organización y planificación

Hacer una lista de lo necesario (uniformes, material escolar, calzado, etc.) es la mejor manera de evitar olvidos de última hora. Además, ayuda mucho elaborar un calendario familiar visible en casa, donde queden claras todas las actividades y compromisos. Con un poco de previsión, los imprevistos serán menos y la vuelta resultará más fluida.

Retomar rutinas sanas

El verano suele traer horarios flexibles, comidas más permisivas y mucho movimiento, pero también desorden. Para preparar a los niños (y a toda la familia):

  • Ajusta los horarios de sueño poco a poco una o dos semanas antes del primer día de clase.
  • Recupera una alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras y proteínas, reduciendo azúcares y ultraprocesados.
  • Mantén la actividad física diaria: además de salud, favorece el descanso y reduce la ansiedad.

 

Material y comodidad en el día a día

Una mochila ergonómica, que reparta el peso de forma adecuada, es esencial para cuidar la espalda de los más pequeños. Lo mismo ocurre con la ropa y el calzado: deben ser cómodos y adaptados tanto al clima como a las horas que pasarán en el colegio. Apostar por materiales de calidad, aunque suponga una inversión inicial mayor, es una forma de cuidar la salud y garantizar durabilidad.

Comunicación y apoyo familiar

Más allá de lo material, lo emocional es clave. Escucha a tus hijos, interésate por cómo se sienten y anímales a expresar sus dudas y temores sin miedo. Hazles ver que es normal estar nerviosos ante lo nuevo. Ayúdales a marcarse metas alcanzables y celebra con ellos cada pequeño logro. Enseñarles a ser resilientes les dará herramientas valiosas para afrontar cualquier reto, dentro y fuera de la escuela.

Salud e higiene: imprescindibles

El contacto con otros niños aumenta el riesgo de contagios, por lo que conviene reforzar hábitos de higiene como el lavado frecuente de manos y la higiene personal. Si realizan actividades al aire libre, recuerda la importancia del protector solar. Además, un chequeo médico o dental antes de empezar el curso siempre es buena idea para arrancar con tranquilidad.

Con una buena preparación, la vuelta al cole puede convertirse en una oportunidad para crecer, aprender y crear rutinas positivas. Mantener el equilibrio entre organización, salud y bienestar emocional hará que tanto niños como adultos vivan este nuevo comienzo con energía y sin sobresaltos.

✨ Desde Farmacia Lilium, te deseamos un feliz inicio de curso.